Había una vez un aula de Colores que en Septiembre de 2019 recibió la llegada de unos niños y niñas.
Cada uno de ellos era único y especial, pronto surgió una bonita magia entre ellos, un hechizo que hizo que todos juntos se ayudaran y aprendieran a descubrir un nuevo mundo que se abría ante ellos.
Ha sido un camino de subida una ascensión con algunos momentos difíciles que juntos hemos logrado superar.
Y en esa montaña que subimos juntos me ha tocado a mi acompañaros, he tratado de ofreceros mi mano y daros todas las herramientas para crecer.
Hemos llegado a la cumbre juntos y me siento muy orgullosa de cada uno de vosotr@s
Gracias peques por esos momentos que me habéis regalado, por todos esos momentos en los que me habéis mirado dándome lo más bonito que se puede ofrecer a una maestra vuestra sonrisa.
Gracias familias por haber confiado en mí durante este tiempo, por vuestra ayuda y paciencia.
Y aunque hoy tegamos que decirnos adiós, siempre estaréis conmigo, os llevo en mi corazón.
Un abrazo.
Carmen